BALTASAR LOBO. UN ZAMORANO EN PARIS.

Zamora es conocida por el patrimonio románico y medieval que alberga. Es una realidad que nadie pone en duda, pero Zamora es también Modernismo, Eclecticismo, es naturaleza gracias al Duero y además cuenta con un legado escultórico impresionante.

De todos los escultores que han alcanzado fama internacional, Baltasar Lobo es el más relevante, por su trayectoria artística, por su calidad y por haberse convertido en un referente de las vanguardias europeas del siglo XX.

Breve biografía

Baltasar Lobo nace en 1910, en Cerecinos de Campos. A los once años ingresa en la Escuela Cervantes de Benavente. Su padre, carpintero de profesión, lo traslada en 1922 al Taller de Arte de Ramón Nuñez en Valladolid para aprender el oficio esculpiendo santos de madera. Al año siguiente asiste a clases de modelado en el Museo de Bellas Artes de Valladolid. En 1927 obtiene una beca de estudio en la Academia de San Fernando en Madrid. En esta ciudad asiste a cursos nocturnos de dibujo en la Escuela de Artes y Oficios, participando en exposiciones colectivas. Con el estallido de la Guerra Civil se traslada de Madrid a Barcelona, y de allí a Francia, exiliado como muchos otros españoles republicanos. Tras su paso por un campo de concentración en el sur del país, logra llegar a Paris.

Un zamorano en Paris

Baltasar se establece en Paris junto a su compañera Mercedes Comaposada Guillén y, gracias a la ayuda de otros republicanos y de Pablo Picasso, conocerán a algunos de las más importantes figuras del momento como Julio González, Pevsner y, sobre todo, Henri Laurens, que se convertirá en su mentor. De esta manera comienza su carrera artística en estrecho contacto con las vanguardias, dando lugar a una búsqueda artística con los correspondientes vaivenes estilísticos.

El ambiente parisino les debió servir a ambos de bálsamo en una situación y un contexto tan complicado como era la condición de exiliados que tenían, con el sufrimiento, desarraigo e incertidumbre que ello conlleva. Por lo tanto, el grueso de su obra vendría a partir de su estancia en París con su consolidación en la escultura. Junto con Picasso y otros artistas españoles de la Escuela de Paris, participó en diferentes exposiciones, como la de Praga de 1946, titulada «El arte de la España republicana».

El legado de Lobo en Zamora

Paseando por nuestra ciudad será muy fácil encontrarte con algunas de las obras de gran tamaño que forman parte del legado que el artista donó a la ciudad.

Una de las obras que más te llamará la atención es la escultura de la Maternidad, que decora los jardines de la Plaza Zorrilla, frente al Palacio de los Momos. El tema de la maternidad es uno de los ejes centrales de su producción artística. Prueba de ello son las decenas de obras dedicadas a la mujer con niño que Lobo realizó durante una entera década.

La mujer es el principal referente en la obra de Lobo. En los jardines del Castillo de Zamora y en el Museo Baltasar Lobo, situado en la Plaza de la Catedral, podemos contemplar un conjunto de esculturas que ponen de manifiesto el estudio y la evolución formal que nuestro genial escultor hace del cuerpo de la mujer. Torsos, figuras femeninas enteras, de pie, tumbadas, en movimiento, que cobran todo su protagonismo en el precioso entorno del Castillo. Stella, Impulso, Cara al viento, Al aire libre, son algunos de los títulos de estas extraordinarias obras.

Sus creaciones han sido galardonadas en varias ocasiones, destacando el Premio Oficial de las Artes y las Letras de Francia en 1981, y el Premio Nacional de las Artes Plásticas de España en 1984. Sus esculturas han estado expuestas en grandes ciudades de todo el mundo, formando incluso parte del paisaje urbano en Zurich, París, Luxemburgo o Caracas. Existen en la actualidad diferentes organismos que trabajan para poner en valor la obra de Lobo y su relevancia en el arte, como son la Asociación Amigos de Baltasar Lobo, o la Fundación Baltasar Lobo.

…y si decides descubrir Lobo con nuestros guías…

La Asociación Zamorana de Guías de Turismo te ofrece la posibilidad de conocer este increíble legado artístico gracias a la ruta Espacios Lobo, que fue diseñada por el Ayuntamiento en colaboración con la Fundación BL y Amigos de BL. Para realizarla puedes pedir información aquí.