Hoy os quiero hablar de un lugar donde podemos encontrar un pequeño y desconocido tesoro que, aunque mutilado, merece la pena acercarse a conocer. Porque no todo el románico está en la capital hay mucho románico escondido que aún por descubrir.
A pesar de la escasa importancia actual de Fuente el Carnero, es indudable que tiempo atrás gozó de mayor relevancia a juzgar por su grandiosa iglesia y es además la cuna del insigne pedagogo Pablo Montesino y Cáceres.
SITUACIÓN
Fuente el Carnero es una pequeña localidad de la provincia de Zamora de apenas unos 50 habitantes situada en la Tierra del Vino a unos 20 km de la capital.
Pertenece al municipio de Corrales del Vino.
La primera mención documentada sobre la población es de 1223 en documentos del rey Alfonso IX de León.
A unos 2 km del pueblo se encuentran los restos de lo que fue el monasterio cisterciense de Santa María de Valparaíso fundado en 1143. Dicho monasterio fue trasladado a la cercana localidad de Peleas de Arriba por orden de Fernando III en 1232, ya que el monarca nació en esas tierras.
Debido a la cercanía con el cenobio la relación entre Fuente el Carnero y Valparaíso fue muy estrecha. Existen numerosos documentos de donaciones y conflictos entre ambos.
Algún autor ha mencionado la pertenencia del lugar a la Orden del Temple, sin embargo, no existe constancia documental.
IGLESIA DE SAN ESTEBAN. UNA JOYA DEL ROMÁNICO.
Está situada en el centro de la localidad, en la cota más alta y está construida en sillería de piedra arenisca bien labrada.
Fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) en 1983.
La visión actual del templo responde a la gran transformación que sufrió en el siglo pasado debido al hundimiento de parte del edificio en torno a 1950. Posteriormente se reconstruye y el tamaño de la iglesia queda muy mermado.
Inicialmente era un templo de tres naves con una planta muy similar a varias de las iglesias de la capital (Santiago del Burgo, Santo Tomé, San Cipriano, etc) y presentaba cabecera plana.
La longitud de la iglesia era aproximadamente el doble que en la actualidad.
A los pies de la nave central se alzaba una torre hoy desaparecida.
En la actualidad podemos apreciar un edificio cuya estructura es románica (XII-XIII) pero con un lenguaje decorativo netamente gótico.
Uno de los espacios mejor conservados hoy en día es la triple cabecera con una capilla mayor que destaca en altura y que fue muy alterada en el siglo XVI.
Actualmente conserva dos de las tres naves (la central y la norte). En el lado norte conserva una portada, a la que antecede un atrio. La portada está formada por una triple arquivolta decorada con motivos geométricos y vegetales.
Destacan también en el exterior la ventana con capiteles figurativos, un rosetón en la zona del hastial, los canecillos y la espadaña de dos cuerpos con arcos de medio punto.
En el interior podemos observar sus arcos ojivales, la profusa decoración de los capiteles, así como las imágenes de la Virgen de la Villa (posible origen s. XII) y el imponente Cristo con un brazo desclavado que procede del desparecido Monasterio de Valparaíso.
PABLO MONTESINO Y CÁCERES
Nació el 29 de junio de 1781 en Fuente el Carnero y falleció el 15 de diciembre de 1849 en Madrid.
Nace en el seno de una familia acomodada y comenzó sus estudios superiores en la Universidad de Valladolid en 1895 para trasladarse al año siguiente a la Universidad de Salamanca. Obtuvo los grados de bachiller en Filosofía y en Medicina. En 1806 se le confirió el grado de licenciado en Medicina.
Fue en estos años de estudiante en la ciudad de Salamanca donde se imbuyó del espíritu liberal que le acompañaría toda su vida.
Trabajó como médico en el Ejército durante la Guerra de la Independencia. Más tarde fue Diputado por Valencia de Alcántara.
Se expatrió a Inglaterra para evitar represalias por su oposición a Fernando VII. Es a partir de ahí cuando su vida experimentó el giro vocacional que tanto influiría en la instrucción pública del país.
Durante sus once años de exilio y movido por la necesidad de educar a sus hijos comenzó a preocuparse por los problemas educativos. Durante este tiempo conoció y leyó los libros de Pestalozzi, entre otros.
La muerte de Fernando VII supuso el fin del exilio y a su vuelta a España desplegó una amplia actividad en el mundo de la educación.
Puede considerarse como el verdadero introductor de las escuelas de párvulos, el padre de las Escuelas Normales en España y un gran protector de los maestros nacionales.
Gran defensor de la importancia de la higiene escolar y de la educación física.
Si quieres conocer más sobre Fuente el Carnero o sobre cualquier otro espacio de nuestra provincia contacta con la Asociación Zamorana de Guías y estaremos encantadas de acompañaros y descubrir juntos todas las joyas que aún se conservan.